viernes, 15 de enero de 2016

Rastas y mamás

Imagen: Irene Owens

Yo tuve piojos no hace mucho tiempo ( dos años más o menos)
y no llevo rastas.
Hubo una temporada en que sí llevé ( rastas) y no tuve piojos.
Ahora, estoy contenta de que ellas ( las rastas) lleguen al parlamento.
Y me encanta que una mamá dé de mamar a su bebé en el congreso y vote con el bebé en brazos. 
Porque me gustan l@s descamisad@s y algún que otro amigo que lleva traje y corbata.
L@s despeinad@s. Y alguien que conozco que se peina veinte veces al día.
Las mamás con bebés en su trabajo. Y Las mujeres que decidieron no tener hijos.
La gente que cree en Dios y también l@s que dejaron de creer.
L@s que no se uniforman.
Las riberas izquierdas de los ríos....
L@s que miran más allá y sonríen.
Y me gusta que cierta parte de la sociedad ande rasgándose sus vestiduras bien planchadas de corrupción.
Ha llegado el momento de que comiencen a aprender y no voy a negar que me divierte al mismo tiempo que siento compasión por sus torpes opiniones impregnadas de rancio fascismo y por sus miradas asombradas. No dan crédito a lo que está pasando. Se les caen los papeles.
Porque les dijeron cuando cubrieron las plazas : "¡ Fuera de aquí, PERROFLAUTAS , si queréis algo, montad un partido político!". Y hoy ese partido político ha llegado al congreso. Aunque hay algo que me falta en el parlamento: las flautas y los perros, pero todo se andará.
Un consejo señora Celia: el vinagre previene los piojos.... si tanto miedo les tiene, pero hay algo que los previene aún más: el no juzgar por la apariencia y la tolerancia.
( Cristina Carrasco)